Pascual García/Cuarto Poder.- La cifra de paro registrado del pasado mes de enero ha mantenido las previsiones del guión y ha sido mala. En concreto, según los datos publicados por el Ministerio de Empleo, en enero se registraron 57.257 parados más, por lo que la cifra total de desempleados se sitúa en 3.760.231.

También como suele ser habitual ha sido el significativo retroceso del empleo en el sector servicios (66.929 parados más) el que ha anulado los resultados positivos en Agricultura (-4.102); Construcción (-7.833) y Sin Empleo Anterior (-4.838).

Por lo que al dato de género se refiere, el número de nuevas paradas (44.193) del pasado mes cuadruplica al de nuevos desempleados (13.064). El desempleo se incrementó tanto en jóvenes menores de 25 años (2.034 personas) como en el grupo de 25 y más años (55.223). Se registraron 1.633.592 contratos, de los que solo 150.162 (9,19%) fueron indefinidos.

El paro subió en todas las comunidades excepto Baleares. Los peores resultados se registraron en Madrid (9.667), Andalucía (9.417) y la Comunidad Valenciana (6.845). En cuanto a las provincias, el desempleo registrado se reduce en cinco, entre las que destacan: Huelva (-2.035), Barcelona (-449) y Melilla (-243). Por el contrario, sube en 47, encabezadas por Madrid (9.667) y Valencia (4.269)

Los beneficiarios de prestación existentes a final del mes fueron 1.984.376, lo que supone un descenso respecto al mismo mes del año anterior del 7,0%. La cobertura del sistema de protección por desempleo durante el mes de diciembre de 2016 (este dato siempre se facilita con un mes retraso) fue de 56,6%. Este dato se conocía caso al mismo tiempo que el Congreso debatía la toma en consideración una proposición de Ley de iniciativa popular, promovida por los sindicatos CCOO y UGT y avalada por más de 700.000 firmas, sobre el establecimiento de una prestación de ingresos mínimos, que alcanzaría los 426 euros y que podría llegar a beneficiar a más de 2,4 millones de personas sin recursos.

Esta prestación se prolongaría mientras el beneficiario carezca de empleo y de recursos económicos y supondría un gasto total que rondaría los 11.000 millones de euros. En concreto, los requisitos de los beneficiarios son tener entre 18 y 65 años, encontrarse en situación de no ocupado, no percibir prestaciones por desempleo, que la renta per cápita sea inferior a 5.837 euros anuales y carecer de ingresos individuales y de los miembros de la unidad familiar establecidos en el 75% del Salario Mínimo Interprofesional (SMI).

La iniciativa cuenta con el apoyo de todos los grupos parlamentarios, salvo del PP y Ciudadanos, por lo que hoy mismo podrá iniciar su tramitación y abrir un periodo de enmiendas.

Volviendo a los datos presentados hoy por el Ministerio de Empleo, la afiliación media a la Seguridad Social registró en enero un descenso de 174.880 personas respecto al mes anterior, hasta alcanzar los 17.674.175 ocupados.