Si la memoria no me falla, hace dos meses que estoy sin escribir un articulo. Ganas de hacerlo no tengo, pero hay personas que cuando me ven me preguntan que porque no escribo. Cada vez que me ve Francisco Ríos Caballero (Paco “el carudo”), me comenta que cuando los sábados le echa un vistazo a El Mirador, busca a Ángel Semitiel y no me encuentra. Una mañana de primeros de febrero, me lo volvió a decir, y le comenté que ese sábado no buscara mi nombre, porque no iba a escribir, pero que al siguiente, lo buscara por si acaso me publicaban uno que iba a hacer por el simple hecho del interés que mostraba. Hay otra persona que también me pregunta, y en varias ocasiones me ha dicho que no deje de escribir, que se reúne en una peluquería con un grupo de amigos, y les gusta la forma en la que digo o expreso las cosas que escribo. Este hombre al que aprecio como si fuera parte de mi familia, es una excelente y extraordinaria persona y el mejor comunista de cuantos conozco. Es un hombre con más de 80 años a sus espaldas, y con una mentalidad a prueba de bombas. Es un autentico hombre de izquierdas, un hombre justo que le gusta las cosas bien hechas y sin nada de fanatismos. Su nombre es Juan Hernández. Me agrada mucho cada vez que nos vemos y lo primero que hago al verle es darle un abrazo en muestra del aprecio y el respeto que le tengo. Llevo un tiempo que entro en Facebook, tengo unos cuantos amigos. Facebook, al igual que todo, si se utiliza debidamente y con respeto, es maravilloso, pero como todo en esta vida, también tiene sus inconvenientes. Aquí se cuelga de todo, unas cosas gustan más y otras menos. También las hay que a mi particularmente no me agradan nada. Hay otras que respeto, pero no las comparto. Comprendo y acepto que cada cual sea de la ideología que le parezca, pero no comparto que se dediquen a llamar constantemente hijos de puta a politicos de ideología opuesta. Dicho esto, voy a centrar este articulo en lo que realmente me habia propuesto, el tema de la inmigración. Me encuentro en varios Facebook que han colgado un anuncio sobre el nuevo Presidente del los EE.UU, Donald Trump, que dice lo siguiente: Deje de odiar a los inmigrantes cuando me convertí en uno de ellos. Creo que no hay persona en la tierra que pueda afirmar que esto es real. La inmigración es un tema demasiado peliagudo y aunque no nos guste porque seamos de diferente pensamiento e ideología, no podemos ni debemos llenarnos de razones en un tema tan complicado. A mis 56 años, todavía no he salido de España y dudo salga en el tiempo que me quede de existencia en esta vida. A las personas no se valoran por su color, raza o nacionalidad, se les valora por como son, al menos es mi forma de ver y valorar a las personas. La persona que es racista no lo es exclusivamente hacia las personas que son de diferente color o raza a la suya, lo es hacia todas las personas que desgraciadamente viven en la pobreza más profunda. La prueba la tenemos en algunos casos que suceden con indigentes que son apaleados e incendiados vivos. Creo no es correcto ni oportuno hacer tales comentarios que no son del todo correctos. El tema de la inmigración es muy complicado, pero creo que no debemos complicarlo todavía más de lo que realmente es. No considero tema de racismo que Donald Trump pretenda frenar la inmigración para que los ciudadanos de su pais tengan más seguridad y más posibilidades de poder encontrar un trabajo con el que poder vivir dignamente. No creo que quien pretende que sus compatriotas puedan vivir mejor sea más malo, que aquellos que no les importa que gente de otras nacionalidades tengan más derechos que los nativos de un pais. Apuesto porque todo el mundo pueda vivir dignamente, pero estoy en total desacuerdo que quienes vienen de otros puntos del planeta se les dé unos derechos que a los ciudadanos de este pais se les niega. Lo primero es lo primero, y lo primero en España debemos ser los españoles. Ni comparto ni acepto que haya un solo español que no se les reconozca sus derechos. Es inaceptable que se utilice tanto a la inmigración para hacer política barata, cuando en este pais hay cuatro millones de parados y cerca de dos sin ningún tipo de prestación y que a los inmigrantes se les utilice como mano de obra barata que lo que esta ocasionando es que no se contrate a obreros nacionales y se pierdan derechos anteriormente conseguidos, Soy de izquierdas, y lo voy a continuar siendo, pero no estoy de acuerdo con la forma que utiliza la izquierda el tema de la inmigración. No es mejor político el que se preocupa antes por lo ajeno, que quien pone interés en lo propio. Es posible que Donald Trump pueda ser el presidente mas malvado de la historia de los EE.UU, pero en este tema no va por el camino equivocado. No es lo más correcto llamar racista a una persona por el simple hecho de pensar de diferente manera a la que uno piensa.