Adolfo Barrena Salces.- Dice el impresentable alcalde de Madrid que él está absolutamente de acuerdo en que haya militares, curas, consejeros, alcaldes, alcaldesas,.... que, por aquello del puesto que ocupan, se salten la fila de las vacunas y, aprovechándose de ello, se vacunen y vacunen a sus colaboradores.
Esta es la derecha, rancia, casposa, aprovechada, corrupta, prevaricadora,... es esa derecha que solo entiende de su casta, de su clase, de sus privilegios, de sus derechos.
Es aquello de yo primero, por encima y delante de todo lo demás.
Yo utilizo, en mi propio beneficio, el puesto al que he llegado para, se supone, servir al interés general. Es una prueba más de la sinvergonzonería de esta gente.
Esa es la derecha, eso es el PP en estado puro. Imagínense a esta gentuza tomando decisiones drásticas para salvar a la ciudadanía. Para procurar el bienestar de la mayoría, para gobernar pensando en los demás y no en su puñetero ego.
Lo real, y no es nada imaginario, es que toda esta gente que se "cuela" demuestra, una vez más, el poco nivel de seriedad de una determinada casta que, para desgracia de todos y todas, sigue ahí, aferrada al sillón.
Lo triste, y jodido, es que podrán seguir ahí porque hay mucha gente que les justifica y que piensa "si pudiera yo también me colaría". Es la misma gente que piensa que el que no roba es porque no puede, la misma que aplaude a quienes evaden impuestos en Andorra, la misma que con su voto da patente de corso a toda esta gentuza.