Adolfo Barrena Salces.- Con estas aguas tan procelosas que vivimos estos días es conveniente intentar no perderse con populismo, frases hechas o twits recurrentes.

Con esto de los apoyos a los presupuestos del estado que se están negociando tenemos a la derecha, a la derecha extrema, a la extrema derecha y a la parte más rancia del espectro político, social y económico, rebuznar a cuenta del, parece que así va a ser, apoyo de Bildu y Esquerra a los presupuestos.

Tienen una capa de barniz democrático tan ligera que no entienden, ni asumen, que además de ellos y ellas, con toda la legitimidad democrática de los votos soberanos de la ciudadanía, están los y las demás.

Por aquello de descalificar oigo a las gentes del PP, de Ciudadanos, Vox , a tertulianos, a algún que otro prócer de la economía y leo y editoriales incendiarias (pero nada rigurosas y muy tendenciosas) poner a parir el posible acuerdo y, para descalificarlo (y hacer populismo barato), dicen que "no se puede acordar nada con los herederos de terroristas".

Se refieren a Bildu negando que son un partido plenamente legal y legitimado por voto soberano y democrático.

De manera mendaz vinculan a Bildu con el terrorismo etarra y, por eso, aunque ya hace tiempo que no está ETA, invocan el recuerdo de aquellos tiempos.

Hay que ser muy cínico hablar, de manera insultante y peyorativa, de "herederos de terroristas," cuando algunos han llegado a declararse herederos del franquismo, cuando han "recordado" que ellos/as ganaron la guerra, cuando defienden un modelo de sociedad patriarcal que es responsable de los asesinatos machistas que niegan y que han causado más víctimas (todas mujeres) que las que causó ETA.

Es el colmo escandalizarse por el posible pacto con Bildu en los presupuestos cuando están gobernando con los apoyos y pactos que tienen con la extrema derecha. Cuando tienen pactos y acuerdos con quienes se declaran herederos del franquismo.

Pero bueno, esto es lo que tenemos. Pero no se equivoquen, lo que de verdad le jode a esta gente, no es que se saquen adelante los presupuestos con el apoyo de Bildu. Lo que les molesta, y mucho, es que serán unos presupuestos más sociales que pensarán más en la gente y en los servicios que en los mercados y la banca.