Pepe Haro.- Tragicómico el espectáculo que han ofrecido los diputados cuya fuerza política procede del franquismo (PP) y también quienes reivindican la dictadura abiertamente(Vox). Todos ellos, ante la Ley Celaá de Educación, se han puesto en pie en el Congreso de los Diputados al grito de 'Libertad'. Es como si Hitler en su día hubiera firmado un manifiesto por el cierre de los campos de exterminio o como si Pinochet hubiera impulsado un manifiesto en favor de los derechos humanos. Así de cínica es nuestra derecha extrema. El mismo cinismo que exhibe en Murcia sacando en el Senado un cartel de 'Salvemos el Mar Menor'. Pero esta reflexión, en realidad, se queda en la superficie: si escarbamos en su reivindicación de Libertad, descubrimos que lo hacen sinceramente. Efectivamente, en el caso que nos ocupa, quieren plena libertad para convertir la educación en un negocio. También la sanidad, las pensiones y todo lo público. La libertad que las derechas quieren no es otra que la de convertir en una mercancía rentable lo que es de todos. El problema es que esa libertad suya es la esclavitud de la gran mayoría de la población. Hitler, Pinochet o Franco tuvieron plena libertad para hacer lo que les dio la gana, y en el ejercicio de esa libertad llevaron el horror a sus sociedades. Fueron absolutamente libres. Como quieren serlo los del PP y Vox.