Los tres partidos de la derecha ciezana, no entran en el contenido de las cuentas municipales para 2020 y, tras hablar del “mundo mundial” en sus intervenciones, se limitan a levantar la mano para abstenerse.
El pleno extraordinario del Ayuntamiento de Cieza, celebrado este miércoles por vídeoconferencia, volvió a mostrar, una vez más, porqué los ciudadanos volvieron a mandar a los bancos de la oposición en las últimas elecciones municipales a las tres derechas ciezanas. Unos partidos que, un día sí y otro también, critican sin fuste alguno al gobierno de coalición formado por PSOE e IU-Verdes, pero que son incapaces de presentar una sola enmienda parcial a los presupuestos municipales, dejando claro que no están capacitados para gobernar Cieza.
La actitud de Vox y Ciudadanos, partidos que no aspiran a gobernar Cieza, pudiera resultar hasta comprensible aunque censurable, por los medios de que disponen y por la indemnización que reciben por asistir a cada pleno y comisión informativa cada uno de sus concejales, 180 euros por sesión. Lo del PP de Manolo Egea, un partido que estuvo 12 años al frente del Ayuntamiento de la localidad, es a todas luces injustificable ya que, a los medios con los que cuentan los otros grupos de la derecha, hay que añadirle una concejala con dedicación exclusiva que, a tenor de los hechos, no parece que atienda sus responsabilidades debidamente, a pesar de que emitan notas de prensa con el titular: “Cieza sigue disfrutando del incansable trabajo llevado a cabo por el Partido Popular”.
La pregunta que se deben estar haciendo los ciezanos, excluidos los incondicionales, que votaron PP, Cs o Vox es para qué ha servido su voto y la respuesta que da un año de legislatura es que fue totalmente inútil.