El primer teniente de alcalde tiene en cartera un plan para que el municipio se convierta en zona de atracción turística durante todo el año.
No cabe duda que la floración, un fenómeno que siempre ha existido en Cieza pero que no se supo aprovechar como en el caso del Valle del Jerte, ha sido en los tres últimos años una clara apuesta del ‘Gobierno del Cambio’ que ha catapultado a Cieza más allá del “mapa” regional y nacional y ha supuesto una importante inyección para la economía del municipio. Un mes en el que miles de personas visitan el municipio atraídos por la bella policromía que vienen ofreciendo nuestros campos en primavera.
Siendo este un avance importante para Cieza, el primer teniente de alcalde, Francisco Saorín, ha avanzado que para la próxima legislatura se pondrá en marcha un “plan para que el municipio se convierta en zona de atracción turística durante todo el año”; y es que en su opinión “tenemos el suficiente potencial para que, junto a la agricultura y la pequeña industria que se va instalando podamos despegar económicamente”. “Vamos a desestacionalizar el turismo en Cieza”, afirma con contundencia.
Saorín explica que, además, de la oferta turística de primavera, que gira en torno a la floración, pero que se complementa con otros eventos a los que hay que “exprimir” el potencial que tienen, como la Semana Santa y las Fiestas del Escudo-La Invasión, Cieza tiene “otras dos estaciones climatológicas que ofrecen muchas posibilidades, el verano y el otoño”.
Para el primer teniente de alcalde, durante el verano, una época del año que propicia un ambiente festivo y la salida a la calle, especialmente por la noche, Cieza tiene que ser un referente regional potenciando eventos que llevan a cabo asociaciones, tales como el Festival de Flockore y la Semana de Cine Mágico, pero también otros que dependen de la programación que hace el consistorio, como la feria y fiestas de San Bartolomé, a lo que hay que añadir la imprescindible recuperación del “Festival de la Luna”, un evento en el que ofrecer un abanico que abarque el teatro, la música y la danza en la calle, que pueda ponernos como un referente puntero en la región para la cultura y la diversión.
Además, Saorín ha subrayado que el otoño ciezano, con la caída de la hoja, ofrece un nuevo espectáculo de colores por explotar con un potencial semejante a la primavera; un potencial que el fotógrafo ciezano Fernando Galindo, como ya hiciera con la floración, ha descubierto y viene publicitando en los dos últimos años, uniendo nuestro otoño con la gastronomía invernal más típica de nuestro pueblo.
No obstante, para el primer teniente de alcalde, en el sector turístico, este potencial que ofrece el municipio tiene “un eje vertebrador que no se ha explotado todavía con una pormenorizada planificación municipal” y este, en su opinión, lo constituye Almadenes-Medina Siyâsa, medio ambiente y patrimonio, museos y calle; “una oferta turística para todo el año que puede convertir a Cieza en un atractivo referente para visitantes de todo el país”, ha concluido Saorín.
